Mi nombre es Sonia, tengo 35 años y me dedico a labores del sector de la salud. Trabajo en un consultorio que rento, al sur de la ciudad. Sin embargo, no he regresado a ese espacio desde hace un tiempo ya que ahí fui agredida sexualmente.
Al terminar una consulta por la noche, salí de mi consultorio. Mientras le ponía seguro, escuché unos ruidos sospechosos, sin embargo, los ignoré.
Al terminar de cerrar, me dirigí a la salida y al caminar por el pasillo, me encontré con un hombre que labora en un local del mismo edificio completamente desnudo y en un estado de alteración.
¿Te sonó familiar?
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